jueves, 11 de junio de 2015

Resumen: Quitate tu para ponerme yo

Es verdaderamente desalentador el ver como unos personajes a los que les hemos dado el voto, pactan con otros personajes para ocupar un sillón al menos por cuatro años. Desalentador y asqueroso ver la cara triunfante de unos personajes a los que les importa bien poco sus votantes y sus propios principios con tal de "echar" (utilizando su misma nomenclatura) con el "malvado" que ha gobernado todos estos años, que aunque haya obtenido la mayoría de apoyos, no se merece gobernar porque lo digo yo y la opinión de los electores me la paso por el arco del triunfo. 
 

Que eso lo digan la extrema izquierda (partido comunista o el tipo de la coleta) es lógico porque desprecian a todos los que no piensan como ellos y el concepto de Democracia misma, pero creía que un partido como el PSOE sería más cabal, teniendo en cuenta no ya sólo sus bravatas durante las elecciones (Acuerdense los desprecios cruzados entre Sánchez y el tipo de la coleta), sino la hemeroteca en la que pactar con partidos totalitarios o nacionalistas le salió muy cara. Lo de Ciudadanos, ese partido que no sabemos que quiere ser (derecha, izquierda, centro o mediopensionaista) es un caso particular, ya que ha pactado con el PSOE de los Eres y a su vez ha pactado con el PP en Madrid.
Todo el mundo lo sabe. Esto es un quitate tu para ponerme yo. Las elecciones en España valen muy poco cuando vemos que gente que ha sido apoyada por un porcentaje irrisorio acaba decidiendo la gobernabilidad de administraciones públicas y que, incluso, le importan bien poco sus supuestos principios. Señores: segundas vueltas (garantizando que gobierne el más votado) y listas abiertas. Ya basta de negocietes con los puestos de responsabilidad. El poder ha de volver a los ciudadanos, siempre desde el respeto a todo el mundo y con el objetivo de regenerar la política. Sí alguien no obtiene la Alcaldía que no sea porque un grupo de perdedores suma sus votos para quitársela. 
PD: Otra parte de la Regeneración sería acabar con un Estado Autónomico fallido y absurdo, que ha arruinado a España, tanto social como económicamente, haciendo que personajes utilicen una región como su coto personal. Por otro lado sería bueno poner a los corruptos ante la justicia, independientemente de que sean los "propios" o los del "otro". Todos los corruptos son unos miserables. Punto.

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