viernes, 28 de octubre de 2016

La rabia de los populistas

La violencia, el postureo y la estúpidez parcantera encarnada en un partido (o movimiento como algunos lo definen) de extrema izquierda liderado por un señor que llama "potenciales delincuentes" a los representantes del pueblo porque si algo hay que tener en cuenta es que TODOS (no sólo ellos) estan ahí porque han sido elegidos. Mucha costumbre tienen los populismos de derechas o izquierdas en erigirse como salvadores de la Patría, identificandose con el pueblo y deslegitimando las instituciones.


Uno podría pensar que lo de "potenciales delincuentes" es un insulto, pero realmente, teniendo en cuenta la catadura moral de este tipo, es un halago, ya que denota rabia; rabia por no haber acabado con el PSOE, al que había que destruir junto a la derecha a la que odian a muerte. Ha sido su partícular derrota. La victoria de los demócratas frente a los populistas esbozada en esa frase del todo querellable.
El espectaculo de ayer fue lamentable. Los que querían la vicepresidencia, el CNI, el control de la televisión pública... volvieron a demostrar lo que les importa el pueblo: nada. Ni una propuesto, ninguna solución. Todos fueron insultos, formas de expresión violentas, referencias a golpes de Estado y deslegitimidades de Gobiernos elegidos por los ciudadanos, aparte de un desprecio más que cruel con las personas mayores (los "malvados" viejos, según ellos) que votan al PP. 
El problema de esto es que siempre habrá gente (y no poca) que les defienda o toleraran determinadas actitudes. Ya pueden literalmente ciscarse en el centro del hemiciclo que todavía habrán algunos que los defenderan y encima diran que tenían derecho a ello. De momento sólo se han ciscado en todo y todos de forma verbal, pero tiempo al tiempo. De momento, las rabia les hace actuar como lo que siempre han sido e intentaron ocultar hace unos meses definiendose como socialdemocratas (luego dice este tipo que el PSOE es como Groucho Marx con el cambio de principios). Presiento que no será el último espectaculo de este comunismo 2.0 (el mismo comunismo rancio de siempre, pero con Twitter), pero la Democracia, los que verdaderamente defendemos el progreso de España, seremos más fuertes.

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