domingo, 15 de enero de 2017

Clásicos Inmortales: Sin Novedad en el Frente

El cine bélico no había alcanzado el punto más algido hasta esta maravillosa, pero terrible película, todo un rechazo a las guerras y a las casuas que las generan. Con este mensaje comienza esta obra: "Este relato no es una confesión ni tampoco una acusación y mucho menos una aventura, ya que la muerte no es ninguna aventura, para quienes se enfrentan a ella cara a cara. Sencillamente trata de hablar de una generación de hombres a quienes a pesar de haber escapado de las bombas, la guerra destruyó"


¡Guerra! las Tropas alemanas van al frente en medio de un jolgorio inusitado con al firme convicción de que hay que defender a la Patria frente a sus enemigos en un conflicto que se prevee que sea cruento, pero favorable a los gérmanos. Así se lo deja claro a sus alumnos el professor Kantorek (Ben Alexander) que, en un discurso ciertamente emocional y patriotico, alienta a sus alumnos a alistarse para defender al país, algo que haran en medio de una alegría tremenda por defender a su patria en una guerra gloriosa para las huestes gérmanas.

¡A la guerra!

Uno a uno los chicos liderados por Paul Bäumer (Lew Ayres) se alistaran en la 2ª compañia del ejército alemán y será pronto cuando sus delirios románticos, aquella gloria prometida por defender a su país en una guerra, se veran poco a poco se romperan. Así se lo dejara claro el despota Cabo Himmelstoss (John Wray), el cual les dice sin rodeos: "Ustedes van a ser soldados, y eso es todo".
Los nuevos soldados llegan a la zona de combate, dandose cuenta deque a su alrededor sólo hay muerte, miseria y hambre, mucha hambre. Y es que algunos llevan sin comer desde hace dos días y en muchos casos recurren al tráfico ilegal para hacerse con comida y cigarrillos.


El primer viaje de los nuevos reclutas a las trincheras con los veteranos, para volver a encadenar el alambre de púas, es una experiencia terriblemente desgarradora, especialmente cuando Behn, uno de los reclutas, es cegado por la metralla, siendo ejecutado en el fuego de la ametralladora Después de pasar varios días en un bunker bajo el bombardeo enemigo, finalmente se mueven hacia las trincheras y repelen con éxito un ataque enemigo, contraatacando. Son enviados de vuelta a las cocinas de campo para obtener sus raciones; Cada hombre recibe dobles ayudas, simplemente por el número de muertos durante el ataque anterior.


Los hombres, que pronto tendrán que volver al frente, acaban por ponerse a discurrir sobre los motivos de la guerra a la que ellos se alistaron con pasión, pero casi ninguno quería. Ellos viven los horrores de la guerra (muerte y hambre), mientras hombres como el Kaiser obtienen la fama. 
Un día, el Cabo Himmelstoss llega al frente y es inmediatamente degradado por su mala reputación (despota y cruel), siendo asesinado durante una batalla. En un ataque a un cementerio, Paul apuñala a un soldado francés, pero ambos se encuentran atrapados en un agujero con el moribundo durante toda una noche. Paul trata desesperadamente de ayudarlo, trayéndole agua, pero falla y no puede evitar que de muera. El joven llora amargamente y pide al cadáver que hable para que así lo perdone. Los horrores de la guerra nuevamente hacen mella.

Atrapados

Volviendo a la primera línea, Paul es gravemente herido y llevado a un hospital católico junto con su buen amigo Albert Kropp (William Bakewell). La pierna de Kropp es amputada, pero no lo descubre hasta algún tiempo después. Será posteriormente cuando Paul es llevado a la sala de vendaje de la que según  ha oido nadie ha vuelto vivo, pero vuelve a las habitaciones alegre y triunfante para caer en el dolor por ver a su amigo Kropp deprimido por la perdida de la pierna.


Paul recibe un permiso de unos días y vuelve a su casa. El joven (cada vez más viejo por lo que ha tenido que soportar y presenciar) está sorprendido por lo desinformados que están todos sobre la situación real de la guerra; Todo el mundo está convencido de que pronto se producirá la llegada a París y el fin de la guerra en favor de Alemania. Cuando Paul visita su antigua clase, encuentra al profesor Kantorek parloteando con el mismo fervor patriótico a una clase de estudiantes aún más jóvenes de lo que era Paul cuando se alistó.

Los horrores de la guerra

El profesor le cede el testigo a su antiguo alumno, pero lo que no espera es que Paul hable con total desprecio de la guerra por lo visto y padecido en el frente, aparte de recelar de las causas supuestamente partioticas que llevan a la misma. "Vivimos en las trincheras y luchamos. Tratamos de no ser asesinados, eso es todo". Los alumnos lo tachan de cobarde y el profesor no da credito a lo que oye. Un enfadado  Paul volvera al frente. 
Allí se encuentra con Kat (Louis Wolheim), uno de sus mentores durante todo ese tiempo y entre ellos discuten la incapacidad de la gente de comprender lo terrible de la guerra. En un combate la pierna de Kat se rompe cuando una bomba cae cerca de un avión, por lo que Paul lo lleva de vuelta a un hospital de campaña, sólo para descubrir que Kat ha muerto por una segunda explosión. Paul se ira disgustado por la muerte de no ya sólo su mentor, sino su amigo.


Paul volverá al frente cuando en medio de una mariposa justo más allá de su trinchera. Paul sonríe y se extiende hacia una mariposa (Algo tan hermoso al lado de un horror tan grande como una guerra), pero al estar demasiado expuesto, es fusilado y asesinado por un francotirador enemigo. Un último plano nos mostrara a la 2ª Compañía, aquella en la que se alistaron unos jovenes ilusionados, llegando al frente por primera vez, desapareciendo poco a poco para mostrarnos a la imagen de un cementerio.


Desgarradora película, de la que han pasado muchos años desde su estreno (1930) y aún hoy desgraciadamente su actualidad sigue intacta hasta el punto que mereciera ser visionada no sólo por su evidente carácter antibelicista, sino por sus imagenes brutales (muchas de ellas de lo mejor de la historia del cine) incluso para la época en que fue producida. El autor del libro en el que se basó, Erich Maria Remarque, de origen alemán, fue uno de los autores prohibidos por el nazismo y no es para menos. Su obra presenta un remarcado desprecio a las guerras, pero a la vez son un canto a la esperanza de que el ser humano comprenda la necesidad del rechazo a los mercaderes de la muerte y todos vivamos definitivamente como hermanos. 

Ficha

Dirección
Lewis Milestone
Producción
Carl Laemmle Jr.
Guión
Maxwell Anderson
George Abbott
Del Andrews
Obra: Erich Maria Remarque
Música
Sam Perry
Heinz Roemheld
David Broekman
Fotografía
Arthur Edeson
Karl Freund
Montaje
Edgar Adams
 
Otros datos

País
Estados Unidos
Año
1930
Género
Bélica
Duración
130’
 
Protagonistas

Actor
Personaje
Lew Ayres
Paul Bäumer
Louis Wolheim
Stanislaus Katczinsky
John Wray
Himmelstoss
Arnold Lucy
Professor Kantorek
Ben Alexander
Franz Kemmerich
Scott Kolk
Leer
Owen Davis, Jr.
Peter
William Bakewell
Albert Kropp

Premios
Oscar

Categoría
Persona
Oscar a la Mejor Película
-
Oscar al Mejor Director
Lewis Milestone

El discurso del profesor


El desengaño


La mariposa

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