El genio Velázquez debió quedar fascinado con el mito de Aracne. Tal fue su influjo que retrató la historia en la que la tejedora es convertida en araña por Atenea, dado que existían
rumores de que tejía mejor que la propia Diosa (enlace).
Sin embargo, el cuadro va mucho más allá de la historia. Velázquez, el artista andaluz, el inmortal genio de sevilla donde demuestra una vez más su gran capacidad para
conseguir algo impresionante: la profundidad en la imagen. La representación única de su inagotable talento.
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